Archivo de la etiqueta: pastel vasco

Pastel vasco

pastelito vasco

Todo a mí rededor suena a cambio, a final de un ciclo que procede del siglo XX.  Siglo al que pertenece la casi totalidad de mí existencia, observo que la inflación de los precios surte en mí ánimo el efecto de unas arenas movedizas, me hunden,  y , sin saber  el por qué, me aferro a lo que tengo, supongo que para hacer pie en los actos cotidianos, mientras nos dejen algo a lo que agarrarnos,  por ejemplo un libro culinario de  la  entonces directora de la Academia de cocina de Bilbao, Dª Florentina Inchausti de Prellezo, en la edición que herede de la familia, es  de 1930, en él he encontrado la receta de este pastelito, y que mejor para una tarde de domingo , como hoy, para  pringarme las manos con harina, huevos, mantequilla y cerezas,  jugar a construir   algo , que alguien escribió hace casi 80 años,  sin saber que en ese túnel del tiempo, la realidad de la voluntad, materializa las cosas. Por expreso  deseo de sentir vida,  de ahuyentar al aburrimiento, ordeno a la mente y esta   ordena a las manos….vida, deseo, realidad… casualidad… ¡Ahí esta mí primer pastelito vasco! Una delicia !

P.D:Suelo ir a mí libre albedrío en casi todo, también, cómo no,  en lo de seguir una receta, siempre voy a traspié de la letra. 😉  Afortunadamente debo tener buen ojo, o mal paladar mis invitados, porque todo me queda bastante rico, según dicen. O sea que más o menos hice las siguientes mezclas.

Ingredientes para la masa quebrada, sable, o medio hojaldrada…para unas  tartelinas. (Utilizo unos moldes de flaneras individuales)

250 gramos de harina, 50 gramos de almendra molida, 150 de azúcar, 125 gramos de mantequilla y dos huevos enteros, 2 cucharadas de licor, pizca de sal (si la mantequilla no la lleva).

Se pone en un bol -para no manchar la mesa… la harina, haciendo en ella un hueco, y allí se echa la mantequilla, en pedacitos, a temperatura ambiente, el azúcar (si se muele antes, mucho mejor, yo le hago aromatizado con cascara de limón o naranja, o vainilla, y lo tengo siempre a mano para estos menesteres ) se trabaja la masa  con las manos, dando unas vueltas, como si la mano fuese un gancho de panadería, hasta que hagamos unas migas gordas, entonces añadiremos los huevos un poco batidos y el licor que tengamos a mano, se amasa bien, hacemos una bola, lo envolvemos en film transparente y al frigo a reposar dos horitas. Entre dos films la estiraremos con la ayuda del rodillo y le damos la forma de los moldes que tengamos. Si se nos pega mucho la metemos un ratito al congelador, para trabajarla mejor.

Mientras hacemos una crema pastelera, y la mermelada de cerezas con las que rellenaremos las tartaletas.

No tirar los  los titos de las cerezas ya que los aprovechamos, para hacer un licor de Kirsch casero a la antigua usanza.

Bueno y vuestra imaginación y creatividad, y ganas de jugar, que son los mejores ingredientes para que esto salga bien y disfrutéis de un postre delicioso, mientras la inflación nos deje.